emisiones CO2, captura CO2
Dos de nuestros mayores problemas ambientales son las toneladas de desechos plásticos inutilizables y las toneladas de dióxido de carbono (CO2) que se liberan a la atmósfera en las emisiones de las chimeneas. Se afirma que un nuevo proceso usa el primero para atrapar al segundo.
La técnica, que actualmente está siendo desarrollada por un equipo de la Universidad de Rice, es una variación de un proceso existente de reciclaje de plástico basado en pirólisis: la pirólisis se define como la descomposición térmica de materiales a temperaturas elevadas en una atmósfera inerte. La nueva investigación se ha publicado en la revista ACS Nano .
El procedimiento comienza con la trituración de los desechos plásticos hasta convertirlos en polvo, luego se mezcla con acetato de potasio , que es la parte única, y luego se calienta a 600 ºC durante 45 minutos. Al hacerlo, el polvo de plástico se convierte en partículas absorbentes llenas de poros a nanoescala, que son muy efectivos para atrapar moléculas de dióxido de carbono en el aire.
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| La mayoría de los poros en cada partícula tienen alrededor de 0,7 nanómetros de ancho. Tour Group |
Cada partícula puede almacenar indefinidamente hasta un 18 por ciento de su propio peso en CO2 a temperatura ambiente. Sin embargo, cuando se calienta a alrededor de 75 ºC, libera el dióxido de carbono atrapado, que posiblemente podría usarse en la producción de productos como combustibles o materiales de construcción. La partícula absorbente se puede reutilizar, ya que aproximadamente el 90 por ciento de sus poros se vuelven a abrir a medida que se libera el CO2.
Como beneficio adicional, cuando las partículas se crean inicialmente, también se produce un subproducto de cera, que podría utilizarse en detergentes o lubricantes. Y lo que es más importante, si bien los plásticos de uso común, como el polipropileno o el polietileno de alta y baja densidad, suelen ser difíciles de reciclar químicamente, son ideales para convertirlos en partículas que capturan CO2.
Los científicos estiman que el coste de usar filtros hechos con el adsorbente para eliminar el CO2 de las corrientes de gases de combustión sería de alrededor de US$21 por tonelada. Por el contrario, un proceso existente que utiliza compuestos conocidos como aminas para eliminar el CO2 de las corrientes de gas natural cuesta entre 80 y 160 dólares por tonelada. Además, se cree que el adsorbente debería durar más que las aminas.
Las fuentes puntuales de emisiones de CO2, como las chimeneas de escape de las centrales eléctricas, pueden equiparse con este material derivado de desechos plásticos para eliminar enormes cantidades de CO2 que normalmente llenarían la atmósfera. Los investigadores creen que sería una excelente manera de tratar un problema, los desechos plásticos, y abordar otro, el de las emisiones de CO2.
Fuente: Universidad Rice
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