08 agosto 2022.- Una vez el Edén de África, considerado uno de los mejores parques naturales de África, el Parque Nacional Gorongosa en M...
08 agosto 2022.- Una vez el Edén de África, considerado uno de los mejores parques naturales de África, el Parque Nacional Gorongosa en Mozambique está regresando a sus antiguas glorias después de años de guerra civil y caza furtiva en masa.
Está situado en el extremo sur del Gran Valle del Rift de África, y tiene una colección de variados ecosistemas desde pastizales y sabanas hasta bosques áridos y calderas estacionales que conducen a la meseta de los bosques.
Establecido en 1920 como una reserva de caza de 1000 kilómetros cuadrados para uso de los administradores de la Autoridad Portuguesa, el parque fue posteriormente proclamado Parque Nacional por las autoridades portuguesas en 1960 y se prohibió la caza. El Parque Nacional Gorongosa se convirtió rápidamente en una de las reservas de safari más buscadas en África para el turismo fotográfico. La década de 1960 vio un gran desarrollo de caminos e instalaciones turísticas en el parque.
En 1976, justo después de la independencia, una encuesta aérea reveló la presencia de uno 6.000 elefantes y unos 500 leones. En 1992, al cesar el conflicto, un conteo aéreo de Gorongosa reveló la existencia de solo 300 elefantes y apenas 6 leones.
Con el final de la guerra civil en 1992, la caza furtiva de Mozambique decayó, pero fue solo en 1996 cuando se proporcionó la protección adecuada al parque con la ayuda de fondos de donantes. En 2004, una organización con sede en los EE.UU., la Fundación Carr, aportó unos fondos para el desarrollo futuro de Gorongosa y la puesta en marcha de instalaciones turísticas. El proyecto se ha puesto en marcha para ayudar a todas las comunidades en los límites del parque y ha tenido un éxito extraordinario.
La vida silvestre está retornando al parque y se está consolidando como uno de los principales destinos de safari en África. Búfalos, hipopótamos, elefantes, antílopes, leones, perros salvajes africanos,... vuelven a formar parte integral del parque.
Los perros salvajes africanos se perdieron completamente de Gorongosa durante la guerra civil (1964-1974). Con algunas poblaciones de presas en auge, el parque necesitaba a sus depredadores naturales. Un grupo de 14 perros salvajes de Sudáfrica fue introducido en 2018 para ayudar a equilibrar el ecosistema. Ese mismo año pudieron contabilizarse 500 hipos y 544 elefantes.
Los esfuerzos realizados por los conservacionistas mozambiqueños e internacionales para restaurar los ecosistemas, las poblaciones animales y para promover un desarrollo económico sostenible de las comunidades próximas al parque, parecen estar funcionando.
El Proyecto Gorongosa integra la conservación y el desarrollo humano con el entendimiento de que un ecosistema saludable beneficiará a los seres humanos, quienes a su vez estarán motivados para apoyar los objetivos del Parque Gorongosa.
Establecido en 1920 como una reserva de caza de 1000 kilómetros cuadrados para uso de los administradores de la Autoridad Portuguesa, el parque fue posteriormente proclamado Parque Nacional por las autoridades portuguesas en 1960 y se prohibió la caza. El Parque Nacional Gorongosa se convirtió rápidamente en una de las reservas de safari más buscadas en África para el turismo fotográfico. La década de 1960 vio un gran desarrollo de caminos e instalaciones turísticas en el parque.
En 1976, justo después de la independencia, una encuesta aérea reveló la presencia de uno 6.000 elefantes y unos 500 leones. En 1992, al cesar el conflicto, un conteo aéreo de Gorongosa reveló la existencia de solo 300 elefantes y apenas 6 leones.
Con el final de la guerra civil en 1992, la caza furtiva de Mozambique decayó, pero fue solo en 1996 cuando se proporcionó la protección adecuada al parque con la ayuda de fondos de donantes. En 2004, una organización con sede en los EE.UU., la Fundación Carr, aportó unos fondos para el desarrollo futuro de Gorongosa y la puesta en marcha de instalaciones turísticas. El proyecto se ha puesto en marcha para ayudar a todas las comunidades en los límites del parque y ha tenido un éxito extraordinario.
La vida silvestre está retornando al parque y se está consolidando como uno de los principales destinos de safari en África. Búfalos, hipopótamos, elefantes, antílopes, leones, perros salvajes africanos,... vuelven a formar parte integral del parque.
Los perros salvajes africanos se perdieron completamente de Gorongosa durante la guerra civil (1964-1974). Con algunas poblaciones de presas en auge, el parque necesitaba a sus depredadores naturales. Un grupo de 14 perros salvajes de Sudáfrica fue introducido en 2018 para ayudar a equilibrar el ecosistema. Ese mismo año pudieron contabilizarse 500 hipos y 544 elefantes.
Los esfuerzos realizados por los conservacionistas mozambiqueños e internacionales para restaurar los ecosistemas, las poblaciones animales y para promover un desarrollo económico sostenible de las comunidades próximas al parque, parecen estar funcionando.
El Proyecto Gorongosa integra la conservación y el desarrollo humano con el entendimiento de que un ecosistema saludable beneficiará a los seres humanos, quienes a su vez estarán motivados para apoyar los objetivos del Parque Gorongosa.
El proyecto se está fortaleciendo cada día gracias a un conjunto de donantes: USAID, la Embajada Real de Noruega, Irish Aid, el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM / PNUD), la Fundación Oak, Howard Hughes Instituto Médico, Zoo Boise, el Gobierno de Portugal, Fundación Rizwan Adatia, Sociedad Geográfica Nacional y miembros del Club de Negocios local.
Fuentes:
https://www.gorongosa.org/
http://www.mozambique.co.za
https://www.nationalgeographic.com
http://www.pbs.org/gorongosa/
https://www.half-earthproject.org
Fuentes:
https://www.gorongosa.org/
http://www.mozambique.co.za
https://www.nationalgeographic.com
http://www.pbs.org/gorongosa/
https://www.half-earthproject.org
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