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Alrededor de un tercio de las personas con enfermedades del corazón sufren problemas para dormir. En un artículo publicado en la revista Science, un equipo de la Universidad Técnica de Munich (TUM) muestra que las enfermedades cardíacas afectan la producción de la hormona del sueño melatonina en la glándula pineal. El enlace entre los dos órganos es un ganglio en la región del cuello. El estudio demuestra un papel previamente desconocido de los ganglios y apunta a posibles tratamientos.
24 julio 2023.- El hecho de que los niveles de melatonina pueden disminuir en pacientes con enfermedades del músculo cardíaco, por ejemplo, después de un ataque al corazón, se conoce desde hace algún tiempo. En general, esto se ha visto como un ejemplo más de cómo una afección cardíaca actúa sistémicamente en todo el cuerpo. Un equipo que trabaja con Stefan Engelhardt, profesor de farmacología y toxicología en TUM, y la primera autora, la Dra. Karin Ziegler, ahora ha demostrado que existe una causa directa detrás de los trastornos del sueño en las personas que padecen enfermedades cardíacas.
Los ganglios como “cajas de distribución eléctrica”
“En nuestro trabajo, mostramos que los problemas del músculo cardíaco afectan a un órgano que, a primera vista, parecería no tener una relación directa con él”, dice Stefan Engelhardt. La melatonina se produce en la glándula pineal, ubicada dentro del cerebro. Al igual que el corazón, se controla a través del sistema nervioso autónomo, que regula los procesos involuntarios del cuerpo. Los nervios relacionados se originan en los ganglios, entre otros lugares. Particularmente importante para el corazón y la glándula pineal es el ganglio cervical superior.
“Para tener una idea clara de nuestros resultados, imagine el ganglio como una caja de interruptores eléctricos. En un paciente que sufre trastornos del sueño después de una enfermedad cardíaca, puede pensar en un problema con un cable que provoca un incendio en la caja de distribución y luego se propaga a otro cable”, dice Stefan Engelhart.
Conexión nerviosa a la glándula pineal destruida en ratones y humanos
El equipo descubrió que los macrófagos, células que comen células muertas, se acumulan en el ganglio cervical de ratones con enfermedades cardíacas. Los mecanismos exactos detrás de esto aún se desconocen. Los macrófagos causan inflamación y cicatrización en el ganglio y la destrucción de las células nerviosas. En ratones, como en humanos, largas fibras que se extienden desde estas células nerviosas, llamadas axones, conducen a la glándula pineal. En etapas avanzadas de la enfermedad, hubo una disminución sustancial en el número de axones que conectan la glándula con el sistema nervioso. Había menos melatonina en los cuerpos de los animales y se interrumpió su ritmo día/noche.
Se observaron efectos orgánicos comparables en humanos. El equipo investigó las glándulas pineales en nueve pacientes cardíacos. En comparación con el grupo de control, se encontraron significativamente menos axones. Al igual que con los ratones, el ganglio cervical superior en los humanos con enfermedades del corazón mostró cicatrices y estaba notablemente agrandado.
Punto de partida para nuevos medicamentos
Los investigadores asumen que los efectos negativos de los axones muertos se vuelven permanentes en una etapa avanzada. “En una etapa temprana, pudimos devolver la producción de melatonina en ratones al nivel original mediante el uso de medicamentos para destruir los macrófagos en el ganglio cervical superior”, dice Karin Ziegler. “Primero, esto demuestra el papel del ganglio en este fenómeno. Y en segundo lugar, inspira la esperanza de que podamos desarrollar medicamentos para prevenir trastornos del sueño irreparables en las enfermedades del corazón”. Esa es una de las tareas que el equipo desea abordar en los próximos años.
Investigando ganglios para otras posibles conexiones
Junto con una nueva esperanza para un gran número de pacientes cardíacos de que se encontrará un tratamiento para los trastornos del sueño, Stefan Engelhardt ve el estudio como una razón para observar los ganglios desde un nuevo punto de vista. “Los nuevos métodos, como la secuenciación espacial de células individuales, hacen posible investigar las células nerviosas individuales mucho más de cerca. Nuestro estudio podría impulsar a los investigadores a comenzar a buscar sistemáticamente conexiones entre otras enfermedades en órganos vinculados a través de ganglios que actúan como cajas de cambios y a considerar los ganglios como puntos de partida en la búsqueda de nuevos medicamentos”.
Engelhardt cree que los ganglios también podrían volverse importantes desde el punto de vista del diagnóstico. Debido a que todos los ganglios cervicales en los pacientes cardíacos que examinaron estaban significativamente agrandados, los investigadores creen que esto puede ser un indicador de insuficiencia cardíaca. El tamaño del ganglio se puede verificar fácilmente con un dispositivo de ultrasonido convencional. Si los resultados se confirman en estudios posteriores, puede ser recomendable ordenar controles más extensos del corazón cuando se encuentre que el ganglio está agrandado.
Fuente: K.A. Ziegler, A. Ahles, A. Dueck, D. Esfandyari, P. Pichler, K. Weber, S. Kotschi, A. Bartelt, I. Sinicina, M. Graw, H. Leonhardt, L. Weckbach, S. Massberg, M. Schifferer, M. Simons, L. Hoeher, J. Luo, A. Ertürk, G.G. Schiattarella, Y. Sassi, T. Misgeld, S. Engelhardt. “Immune-mediated denervation of the pineal gland underlies sleep disturbance in cardiac disease”. Science (2023). DOI: 10.1126/science.abn6366
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