Mecanismo de Ajuste de Carbono en Frontera (CBAM) de la UE: el impulso a los objetivos de Europa en materia de cambio climático
Shutterstock |
El bloque europeo aspira a convertirse en el primer continente neutral en carbono. Una nueva política llamada CBAM se espera contribuya a tales ambiciones y persuada a otros países a seguir sus pasos.
16 marzo 2024.- El año 2023 fue importante para las noticias climáticas, desde un calor récord hasta que los líderes mundiales finalmente pidieron una transición para abandonar los combustibles fósiles . En un hito menos conocido, también fue el año en que la Unión Europea lanzó una nueva y ambiciosa iniciativa que podría potenciar sus políticas climáticas.
Envuelta en un lenguaje arcano plagado de muchos "de esto", "considerando" y "teniendo en cuenta" se encuentra una política que no sólo podría ayudar a financiar el compromiso de la Unión Europea de convertirse en el primer continente neutral en carbono del mundo, sino también impulsar (obligar) a industrias de todo el mundo a reducir sus emisiones de carbono.
Es el establecimiento de un precio del carbono lo que obligará a muchas industrias pesadas a pagar por cada tonelada de dióxido de carbono, o emisiones equivalentes de otros gases de efecto invernadero, que emiten. Pero lo que hace que esta tarifa sea revolucionaria es que se aplicará a las emisiones que no se producen en suelo europeo. La UE ya pone precio a muchas de las emisiones creadas por las empresas europeas. Ahora, a través del nuevo Mecanismo de Ajuste de Carbono en Frontera, o CBAM, el bloque cobrará a las empresas que importen los productos específicos ( cemento, aluminio, electricidad, fertilizantes, hidrógeno, hierro y acero) a la UE, sin importar en qué parte del mundo esos productos sean fabricados.
Estas industrias suelen ser fuentes grandes y persistentes de emisiones de gases de efecto invernadero y abordarlas es clave en la lucha contra el cambio climático, según el Instituto Internacional para el Desarrollo Sostenible, un grupo de expertos ambientales. Si esas empresas quieren seguir haciendo negocios con empresas europeas, tendrán que hacer limpieza o pagar una tarifa. Eso crea un incentivo para que las empresas de todo el mundo reduzcan las emisiones.
En la primera fase de CBAM, que comenzó en octubre de 2023, las empresas que importan esos materiales a la UE deben informar sobre las emisiones de gases de efecto invernadero involucradas en la fabricación de los productos. A partir de 2026 tendrán que pagar una tarifa. Incluso tener que proporcionar datos sobre las emisiones será un gran paso para algunos productores y podría proporcionar datos valiosos para los investigadores del clima y los responsables de la formulación de políticas.
COMENTARIOS