Díaz Ayuso acusa a Sánchez de romper la igualdad de todos los españoles en su “camino a la descomposición”
14 junio 2024.- Declaraciones de la presidenta de la Comunidad de Madrid tras participar en un proyecto de la Fundación A la Par
El Fiscal General no puede seguir un minuto más en su puesto, cometiendo ilegalidades y habiendo sido advertido por ello. Sánchez y el Fiscal General no seguirían un minuto más en cualquier otro país, con un gobierno con unos mínimos de decencia, de ética y, desde luego, de respeto por la separación de poderes y por el Estado de derecho. Con respecto a lo que estamos viendo en estas últimas horas con el Fiscal General a todas luces es un completo escándalo, que se esté buscando una fiscalidad, una financiación y una impunidad para la política catalana. Creo que estamos en una situación que no habíamos vivido hasta la fecha. Me parece un auténtico despropósito. ¿Qué es esto de que haya regiones con unos privilegiados sobre otros, con leyes y financiación hecha la carta para algunos? Y mientras vemos en paralelo barbaridades como la sucedidas en el Parlamento de Navarra, ayer mismo, cuando se señaló y se dejó como corrupta a nuestra monarquía, a la monarquía de todos los españoles, y muy especialmente también el caso de Baleares, donde ha permitido el Partido Socialista que no se nombre hija predilecta de Mallorca a la Princesa Leonor. Esto nos demuestra que el PSOE ya se define como un partido de ultraizquierda y además que ha roto por completo la igualdad y la igualdad ante la ley y las oportunidades de todos los españoles en ese camino a la descomposición. El Partido Socialista y, en concreto, Pedro Sánchez, ha llevado su proyecto a la ultraizquierda y para eso ha decidido romper con todas las reglas y los consensos básicos del 78, privilegiar a unas comunidades autónomas frente a otras y muy especialmente romper ese principio de separación de poderes y de igualdad de los españoles ante la ley y las oportunidades. Y, por eso, lo que pretende hacer ahora mismo con Cataluña es una barbaridad, una atrocidad y demuestra que desde La Moncloa pretende comprar voluntades, pretende comprar elecciones y es un proyecto al que ya no le queda ningún límite en ese camino a la ultraizquierda donde se ha metido el solo el señor Sánchez.
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