Riesgo de fatiga en las Iniciativas ciudadanas europeas sobre el sector agroalimentario
Las iniciativas relacionadas con la agricultura, la alimentación y, en particular, la protección y el bienestar de los animales representan una parte importante de las iniciativas ciudadanas europeas (ICE). Siete de las diez iniciativas a las que la Comisión ha tenido que responder hasta ahora en el marco del mecanismo de participación de la UE pertenecen a estas categorías.
14 septiembre 2024.- Para que el ejecutivo de la UE considere una ICE, se necesitan un millón de firmas de al menos siete Estados miembros. Algunas de las iniciativas, como 'End the Cage Age' para prohibir las jaulas en las granjas de animales y 'Fur Free Europe', se encuentran entre las campañas más exitosas de la historia, con 1,4 millones y 1,5 millones de firmas, respectivamente.
Varias organizaciones de todo el continente están actualmente recogiendo firmas para promover el etiquetado del origen de los alimentos, incentivos para las proteínas de origen vegetal y la carne de granja, o la protección de la agricultura europea.
Empíricamente hablando, se podría concluir que los ciudadanos de la UE se preocupan por los alimentos y los animales (y el agua, ya que Right2Water es la movilización más popular con 1,6 millones de firmas) y creen que la UE puede cumplir sus promesas.
Esta actitud ciudadana se corresponde con la capacidad de las ONG y las organizaciones interesadas del sector para movilizarse a través de las fronteras nacionales en campañas que necesitan un mensaje simple y pegadizo para tener éxito.
Por supuesto, el proceso no es todo cocinar y curry (o cachorros y arcoíris, si lo prefieres).
Una vez que la Comisión acepta la petición, ponerla en práctica es otra historia, algo que han destacado las ONG.
“Instamos a la Comisión Europea a que defienda sus valores democráticos, actuando en relación con la ICE ‘Acabemos con la era de las jaulas’ […] y a que presente una propuesta legislativa para garantizar una mejor protección de los animales de granja en la UE”, declaró a Euractiv la directora general del Eurogrupo para los animales, Reineke Hameleers.
Las ICE “se crearon para dar a la gente una voz directa a la hora de dar forma a las políticas de la UE, pero la inacción de la Comisión en iniciativas cruciales […] socava esa promesa democrática”, dijo a Euractiv la secretaria general de Slow Food, Marta Messa, refiriéndose no solo a 'End the Cage Age' sino también a otra ICE 'Save Bees and Farmers'.
En relación con la iniciativa «Acabar con las jaulas», la Comisión no ha propuesto hasta ahora una revisión exhaustiva de la legislación sobre bienestar animal.
En el informe final del Diálogo Estratégico sobre Agricultura, las partes interesadas recomendaron actuar para 2026.
En cuanto a la iniciativa de 2022 "Salvemos a las abejas y a los agricultores", la Comisión dijo en 2023 que, en lugar de una nueva legislación, había tratado de ultimar la Ley de Protección de la Naturaleza y un nuevo reglamento sobre pesticidas. El ejecutivo de la UE retiró este último después de que el Parlamento Europeo no lograra llegar a un acuerdo al respecto.
Sin embargo, el fracaso del Parlamento Europeo en alcanzar un acuerdo sobre los pesticidas ejemplifica cómo los procesos democráticos complejos pueden tomar caminos inesperados para quienes los inician.
“La ICE no es un instrumento vinculante ni un referéndum. Es un instrumento para fijar una agenda”, explicó un portavoz de la Comisión Europea.
Sin embargo, la brecha entre las expectativas transmitidas por los mensajes simples necesarios para hacer campaña y la realidad del complejo proceso de toma de decisiones de la UE podría generar frustración, lo que a su vez podría actuar como una barrera para el mecanismo en el largo plazo.
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