covid, salud, ateroesclerosis
La COVID-19 no es solo una enfermedad respiratoria: puede atacar silenciosamente al corazón. Una nueva investigación revela que el virus acelera la acumulación de placa en las arterias, lo que aumenta el riesgo de sufrir ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares mucho después de la recuperación.
05 febrero 2025.- Un nuevo estudio ha descubierto que la COVID-19, causada por el virus SARS-CoV-2 , está relacionada con la acumulación acelerada de placa en las arterias coronarias, lo que aumenta el riesgo de complicaciones relacionadas con el corazón. Los hallazgos se publicaron el 4 de febrero en Radiology , la revista de la Radiological Society of North America (RSNA).
“La COVID-19, causada por el SARS-CoV-2, se caracteriza inicialmente por una lesión pulmonar aguda e insuficiencia respiratoria”, explicó el autor principal del estudio, el Dr. Junbo Ge, profesor y director del Departamento de Cardiología del Hospital Zhongshan de la Universidad de Fudan en Shanghái (China). “Sin embargo, la evidencia emergente indica que la COVID-19 también implica una respuesta inflamatoria extrema que puede afectar al sistema cardiovascular”.
Las consecuencias duraderas de la inflamación
El Dr. Ge señaló que esta inflamación continúa más allá del primer mes de la infección, lo que aumenta el riesgo de problemas cardiovasculares graves e incluso la muerte.
Para comprender este impacto, los investigadores utilizaron la angiografía coronaria por TC (CCTA) para examinar los cambios en el tejido que rodea las arterias coronarias. Analizaron los signos de inflamación, la acumulación de placa y la presencia de bloqueos arteriales de alto riesgo.
El estudio retrospectivo incluyó pacientes que se sometieron a ACTC entre septiembre de 2018 y octubre de 2023. El grupo de estudio final de 803 pacientes (edad media, 63,9 años, 543 hombres) incluyó a 329 pacientes (41 %) que se sometieron a imágenes antes de la pandemia de COVID-19 y a 474 pacientes que se sometieron a imágenes durante la pandemia. De ellos, 25 pacientes estaban infectados con SARS-CoV-2 antes de la obtención de imágenes.
Crecimiento de placa y lesiones de alto riesgo
El equipo de investigación analizó un total de 2.588 lesiones de la arteria coronaria, incluidas 2.108 lesiones entre pacientes con SARS-CoV-2 y 480 lesiones entre pacientes no infectados.
En todos los pacientes, los investigadores compararon las mediciones iniciales y de seguimiento de los cambios en el volumen de la placa, la presencia de placa de alto riesgo y la inflamación. También analizaron la relación entre el SARS-CoV-2 y los eventos cardiovasculares, como un ataque cardíaco o un procedimiento de revascularización.
Mayor riesgo de sufrir ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares
Al inicio del estudio, la estenosis media, o estrechamiento de la arteria, por lesión era del 31,3%. Solo el 8,1% de las lesiones tenían una estenosis de diámetro del 50% o más.
En comparación con los pacientes no infectados, el volumen de la placa aumentó más rápido en los pacientes con SARS-CoV-2. Las lesiones en pacientes con infección por SARS-CoV-2 tuvieron una mayor incidencia de convertirse en placas de alto riesgo (20,1 % frente a 15,8 %) e inflamación coronaria (27 % frente a 19,9 %). Los pacientes con COVID-19 también tuvieron un mayor riesgo de falla de la lesión diana (10,4 % frente a 3,1 %), un indicador de mayor riesgo de ataque cardíaco o accidente cerebrovascular.
“La inflamación posterior a la COVID-19 puede provocar un crecimiento continuo de la placa, en particular en placas no calcificadas de alto riesgo. Los pacientes con infección por SARS-CoV-2 tienen un mayor riesgo de infarto de miocardio, síndrome coronario agudo y accidente cerebrovascular durante hasta un año”, afirmó el Dr. Ge.
La necesidad de un seguimiento cardiovascular a largo plazo
Agregó que estos efectos persisten durante las secuelas del COVID-19, independientemente de comorbilidades como la edad, la hipertensión y la diabetes.
“Es imprescindible contar con estrategias de tratamiento eficaces para estos pacientes”, afirmó el Dr. Ge. Los hallazgos sugieren que la infección por SARS-CoV-2 puede exacerbar el riesgo cardiovascular al acelerar la progresión de las placas susceptibles y la inflamación coronaria. Sin embargo, se requiere una comprensión más completa de los mecanismos biológicos para formular enfoques preventivos y terapéuticos.
Referencia: “SARS-CoV-2 Infection Association with Atherosclerotic Plaque Progression at Coronary CT Angiography and Adverse Cardiovascular Events” by Dr. Ge, Neng Dai, M.D., Xianglin Tang, M.D., Yiqing Hu, M.D., Hao Lu, M.D., Zhangwei Chen, M.D., Shaofeng Duan, Ph.D., Weifeng Guo, M.D., Pranav Prakash Edavi, M.D., Yongfu Yu, Ph.D., Dong Huang, M.D., and Juying Qian, M.D., 4 February 2025, Radiology. doi: 10.1148/radiol.240876
COMENTARIOS